¿Te planteas la contratación de un becario? Así es como debes hacerlo.
Hoy en día, contratar a un becario puede ser de gran ayuda para aliviar la carga de trabajo por la que atraviesa tu empresa. La persona que contrates como becario, puede apoyarte terminando aquellos proyectos o tareas, que llevan un tiempo sin acabarse y que necesitamos quitarnos de encima cuanto antes. Además, de esta forma, también estamos ayudando a esa persona a introducirse en el mercado laborar, dándole la oportunidad de comenzar a crear su experiencia laboral.
Sin embargo, debemos tener en cuenta, que como si se tratara de una contratación al uso, debemos hacer la selección correcta, si queremos evitar problemas.
¿Cómo contratar a un becario?
Lo primero que debemos considerar, es que, en estos casos lo que debemos valorar es su potencial y no su experiencia laboral, puesto que en muchos casos, se tratará de estudiantes que no contarán con experiencia laboral de ningún tipo. A pesar de ello, esto no debe suponernos ningún problema. El mercado está lleno de chicos y chicas, que no han trabajado nunca, pero cuentan con un gran potencial, que son proactivos y que tienen muchas ganas de “comerse el mundo”. Eso es lo más importante. El resto se aprende.
Por lo tanto, debemos centrarnos en evaluar la aptitud de esa personas, sus habilidades y sus capacidades personales. También, es importante conocer el nivel de interés por la empresa y su compromiso. Todo esto, podemos saberlo con una serie de preguntas, que tendremos la oportunidad de realizar durante la entrevista al futuro becario.
¿Cómo entrevistar a un becario?
Para conocer si esa persona tiene las habilidades necesarias para el puesto de trabajo, deberemos preguntarle sobre sus estudios y aplicar preguntas del tipo:
- ¿Cómo aplicaría sus conocimientos de forma específica en esta empresa?
- ¿Cómo te organizas para manejar tus proyectos universitarios?
- ¿Por qué decidiste estudiar esa carrera universitaria /FP?
En otro orden, para conocer el nivel de interés por la empresa, deberemos preguntarle por qué está interesado o interesada en realizar sus practicas en tu empresa. Los mejores candidatos trabajarán duro y estarán dispuestos a aprender, por lo que se mostrarán interesados con todo lo relacionado con la empresa. Sin embargo, también existen aquellos estudiantes, que sólo quieren hacer las prácticas porque son un requisito obligatorio para poder obtener el título. Huelga decir, qué perfil es el que le interesa a tu empresa.
En estos caso, algunas preguntas procedentes son:
- ¿Qué sabes de nuestra empresa?
- ¿Por qué quieres hacer prácticas en esta empresa?
- ¿Tienes alguna pregunta para nosotros?
Evidentemente, aunque el candidato no tenga experiencia laboral, sí necesitamos que esté preparado. Por lo que necesitaremos hacer preguntas que nos demuestren si conoce o está familiarizado con el trabajo que desempeñará. De esta forma, además de reconocer el potencial de esa persona, también podemos conocer su nivel de interés y compromiso.
Un becario no tiene por qué ser una persona que esté de paso por tu empresa en un momento puntual, si no, que puede convertirse en un empleado que genere valor en ella, y quieras contratarlo para que forme parte de tu plantilla a largo plazo. Para ello, es importante conocer cuales son sus metas, una vez acabados los estudios.
En este caso, podemos hacer preguntas del estilo:
- ¿Por qué deberíamos contar contigo?
- ¿Cuáles son tus objetivos con estas prácticas?
- ¿Qué planes tienes para cuando acabes los estudios?
En definitiva, la contratación de becarios es una oportunidad para atraer talento a la empresa, cargado de ganas de trabajar y aprender, para hacerse un hueco en el mercado laboral. Además, nos puede servir para mejorar el clima laboral, ya que en la mayoría de los casos, como decimos, son personas con mucha actitud. Lo cual influye en el resto de compañeros.