En un rincón pintoresco de la provincia de Ligonde, Galicia, nos encontramos con José, un experimentado ganadero gallego que nos comparte con pasión y detalle su vida y trabajo en el campo. En las siguientes líneas, te invitamos a descubrir más sobre su experiencia a través de una entrevista detallada donde exploramos las técnicas, complejidades y desafíos de la ganadería.
Cuéntanos un poco sobre tu experiencia y cómo empezaste en la ganadería
Nací en esta aldea de Ligonde, aunque emigré por circunstancias de la vida. Estuve en Suiza, pero regresé aquí hace muchos años porque mis padres no tenían otro relevo que no fuese yo. Lo acepté con gusto, ya que el trabajo fuera no me llenaba.
Conocí la Galicia rural de antes, y después de la incorporación de los tractores todo cambió. Pasamos de trabajar las tierras a mano a utilizar maquinaria, lo que hizo que el trabajo fuera más llevadero. Mi tractor fue el segundo en el pueblo, y desde entonces hemos transformado tierras abandonadas en praderas, aumentando la ganadería y mejorando la calidad de vida.
¿Cómo ha cambiado la ganadería con el tiempo?
La ganadería ha evolucionado mucho. Con la introducción de los tractores, todo cambió. Antes, la ganadería era pequeña, con cuatro o cinco vacas por familia. La incorporación de tractores cambió todo, permitiendo transformar tierras y aumentar la producción. También hemos pasado de tener unas pocas vacas a manejar rebaños más grandes y especializados. Esto ha aliviado mucho el trabajo físico que se hacía a mano. Hoy producimos alimentos de calidad tanto para la familia como para el ganado, y también generamos ingresos. La calidad de vida ha mejorado, pero también enfrentamos nuevos desafíos, como los altos costos y la necesidad de cumplir con regulaciones estrictas.
¿Qué nos puedes decir sobre el manejo de los pastos y la alimentación del ganado?
Aquí, en Galicia, los pastos son verdes casi todo el año, pero no son autosuficientes. En primavera, cortamos hierba tres veces para hacer bolas de ensilado que usamos en sequía e invierno. Las vacas necesitan mucha nutrición, comen entre 60 y 70 kg de comida al día y pueden llegar a beber hasta 100 litros de agua en verano. Aunque estemos en una región con clima cambiante, siempre aseguramos que las vacas tengan el mejor alimento disponible.
Has mencionado la importancia de la calidad de la carne. ¿Cómo lográis esto?
Criamos ternera gallega suprema, con sello de garantía de calidad. Las vacas nodrizas amamantan a sus crías hasta los 7-8 meses, asegurando una carne tierna y de primera calidad. También engordamos las vacas mayores, produciendo carne muy valorada, similar a la del buey, porque el chuletón de vaca gorda o de buey de 7 años es muy apreciado y demandado en nuestra gastronomía.
Este tipo de carne de vaca mayor y de buey es considerada gourmet y un manjar para los amantes de la buena carne. La Rubia Gallega no se encuentra en cualquier carnicería, en España se puede comprar online en Masmit.
¿Qué retos enfrentas como ganadero en Galicia?
La ganadería aquí requiere mucha responsabilidad. Tenemos que gestionar bien la alimentación y salud del ganado para evitar pérdidas. Por ejemplo, controlamos los partos cuidadosamente para asegurar que las vacas y sus crías estén sanas. Además, debemos ser autosuficientes para reducir costos y mantener la rentabilidad.
¿Cuál es la situación actual de la raza rubia gallega?
La rubia gallega es una de las razas más reconocidas en Galicia. Mi padre fue fundador de la asociación de la raza en los años 60, y hoy en día somos más de 2.000 socios. Esta raza es muy apreciada por su carne de alta calidad y su eficiencia en la producción. La rubia gallega consume menos que otras razas lecheras, lo que la hace más sostenible. A diferencia de las vacas blancas y negras, que tienen muchos problemas de salud y requieren más inversión en alimentación y cuidados veterinarios, la rubia gallega es más autónoma y resistente. No obstante, requiere mucho cuidado y gestión para mantener su salud y productividad.
¿Qué opinas sobre el uso de antibióticos en la ganadería?
Aquí en España, el uso de antibióticos está muy regulado. Ahora se prefieren tratamientos naturales para evitar residuos en la carne. Esto es crucial para mantener la calidad y seguridad de nuestros productos.
En relación con la salud de las vacas, uno de los problemas más comunes es la dificultad en los partos. Algunas vacas tienen canales de parto estrechos, lo que puede complicar el nacimiento del ternero. Y para ello, utilizo métodos naturales siempre que es posible. Para problemas menores, como infecciones, utilizamos tratamientos naturales. La prevención es clave, por lo que mantenemos un registro detallado de la salud de cada vaca y hacemos controles regulares.
Finalmente, ¿qué le dirías a las nuevas generaciones interesadas en la ganadería?
La ganadería es una profesión que requiere pasión, paciencia y mucho trabajo. Es importante amar lo que haces y estar dispuesto a aprender constantemente. También es vital gestionar bien los recursos y ser autosuficiente para asegurar la sostenibilidad del negocio.
Fuentes:
- De viaje por España, conociendo a un ganadero gallego. Parte 1. https://www.youtube.com/watch?v=kOpsN60XrQ4
- De viaje por España, conociendo a un ganadero gallego. Parte 2. https://www.youtube.com/watch?v=LmIJFozkFmc