«Apostar por el negocio familiar, cuando todo apunta a que los negocios a pie de calle, poco a poco, tienen menos afluencia, es una decisión difícil» Borja Beltrán, gerente de Joyería Gimeno
Joyería Gimeno es un negocio familiar con más de 50 años, que ha contado con tres generaciones al frente de la empresa. En esta entrevista conocemos de la mano de Borja Beltrán Gimeno, gerente de la firma, cómo ha sido y está siendo la transformación digital de una empresa como esta y cómo afrontan los retos de que conllevan todos estos cambios.
¿A qué os dedicáis en Joyería Gimeno?
Somos una empresa familiar que nos dedicamos a la joyería y relojería y todo lo relacionado en ello: reparación de relojes y joyas, grabado de piezas, fabricación de piezas personalizadas, venta de lingotes de oro y compra de oro.
Háblanos de la historia de la historia que hay detrás de Joyería Gimeno.
Todo viene de mis abuelos. Yo ya soy la tercera generación que se ocupa del negocio. Mi abuelo empezó como comercial de joyería en el año 1950, viajando por media España. En el año 1974 se abrió la primera Joyería Gimeno en Rocafort, de ella se ocupaba mi abuela y mi madre. En el año 1978 se abrió la segunda Joyería en Moncada, ya gestionada por mis padres, Vicente Beltrán y Carmen Gimeno. En los primeros años estuvo en otro local en Moncada, pero desde hace 28 años estamos en C/ Luis Vives nº5. Y ahora soy yo el que gestiona el negocio.
¿Qué ha conservado y qué ha cambiado la marca a pesar del paso del tiempo?
En esencia, el negocio ha cambiado poco. Es decir, el paso de los años ha hecho que fuésemos renovando la imagen de empresa, logo y demás. Pero seguimos vendiendo joyas de oro y plata, relojes, etc. Aunque, sí que es verdad, que como los tiempos cambian, las modas en joyería también. Siempre estamos atentos a las últimas tendencias en diseño y tecnología. Por ejemplo, en los relojes es dónde quizá más se ha notado. Desde hace un tiempo, tenemos marcas que fabrican Smartwacht como los relojes deportivos de Garmin o los SmartPro de Viceroy.
¿Cuáles son sus recuerdos de infancia en la joyería?
Mis recuerdos desde pequeño son en las dos joyería que teníamos, tanto la de Rocafort, con mi abuela, como en la de Moncada, con mis padres. Recuerdo revisar con mi abuelo todas las mantas que tenía llenas de cadenas, pulseras, anillos y demás joyas, como si fuera un juego para hacer un listado de faltas y precios. ¡Vamos! Que de pequeño ya hacía inventarios.
Y en Moncada recuerdo llegar del colegio y merendar en la tienda mientras jugaba con mi hermano en la trastienda. Al ser un negocio familiar de tantos años se generan muchos recuerdos porque pasábamos (y pasamos) mucho tiempo en la tienda.
¿Quiénes forman el equipo de Joyería Gimeno?
En este momento lo formamos mi madre, Carmen Gimeno y yo. Sigue siendo un negocio familiar después de tantos años.
¿Qué os animó a vender online? ¿Cómo fueron los comienzos?
Pues la lógica. Si queríamos actualizarnos y abrir otra vía de negocio teníamos que estar en Internet. Hoy en día, si tu negocio no tiene web o redes sociales es muy complicado darte a conocer más allá de tu zona física. Y además, como cualquier persona que necesita algo primero lo busca en Internet, pues decidimos que debíamos estar. De esto ya hace cuatro años.
Los comienzos, pues no son fáciles, claro. Pero, poco a poco, nos vamos haciendo un hueco y ya tenemos clientes de España y Portugal. Esperemos que este año nuestras fronteras se amplíen y podamos vender fuera de la península.
¿Qué diferencia Joyería Gimeno del resto de marcas de joyería como la vuestra? ¿Cuál es el valor diferencial de la marca?
Nos queremos diferenciar con el trato al cliente. Aportamos al cliente toda la experiencia de años, asesorando en todos los pasos de la compra. Por ejemplo, no es lo mismo si el cliente está buscando algo para regalar o algo para él.
Hay que tener en cuenta los gustos de la persona y el estilo. Charlando un poco y con la experiencia de los años, puedes intuir si el producto le gustará o no. Y esto lo hacemos tanto en la tienda física como online. Animamos a que si alguien tiene dudas al buscar algo en la web que nos llame y le atenderemos encantados.
¿De dónde procede exactamente vuestro producto?
La mayoría de nuestros productos proceden de España, si hablamos de joyería, tenemos proveedores que son nacionales sobre todo en oro. En la plata existen muchas más marcas y son de varios sitios de Europa. Pero dependiendo de las marcas y de donde fabriquen, proceden de un sitio u otro. En relojería pasa lo mismo, las marcas tienen centrales en España, que es de donde nos mandan el producto a las joyerías.
¿Cómo definirías al público de Joyería Gimeno?
Tenemos público de todo tipo: tenemos clientes de paso, que ven algo en el escaparate y se enamoran; gente que viene recomendada por otros clientes o gente que viene a buscar algo que solo tenemos nosotros. Además, como en todos los negocios que llevan muchos años, tenemos clientela fija y muchos de ellos son amigos.
También tenemos a los hijos e hijas de esos clientes y amigos fieles de siempre, que ahora vienen a comprar también. Suponemos que el trato familiar, la confianza es lo que nos hace tener ese público. Y los últimos en incorporarse, han sido los clientes online, que también son fieles y confían en nuestra web.
La mayoría de gente, cuando compran una pieza en internet, al ver que somos una joyería física confían más en nosotros. Saben que respondemos y puedes contactar con nosotros.
¿Cuál es la decisión más difícil que ha tenido que tomar?
Apostar por el negocio familiar. Cuando todo apunta a que los negocios a pie de calle, poco a poco, tienen menos afluencia y tú ves que las costumbres de consumir cambian, y que en Internet se encuentra todo, lanzarte a un proyecto como este y apostar por una nueva forma de vender es la decisión más difícil.
¿Cómo define el estilo de negocio de Joyería Gimeno?
Un estilo que se adapta al momento. Desde que yo empecé los gustos y los tiempos han cambiado mucho y en cada ciclo las tendencias cambian. Pero en joyería existe un constante que siempre son los básicos, por ejemplo las cadenas. Es una pieza de joyería que siempre se demanda, y de la que tenemos muchos modelos. En esta categoría también entrarían los pendientes, pulseras, colgantes, etc. Vamos, que el estilo depende de la temporada en la que estemos.
¿Qué esperáis del futuro?
En el futuro esperamos continuar con la confianza de nuestros clientes. Sin ellos esto no sería posible, mantener un negocio a pie de calle es más que un negocio, es una apuesta por tus clientes y ellos por ti. En Internet es algo parecido, pero a distancia y para ello, esperamos tener más presencia online y poder expandir la marca todo lo que podamos.
